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viernes, 18 de marzo de 2022cermi.es semanal Nº 474

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"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"

Reportaje

Por fin, la accesibilidad cognitiva

17/03/2022

Blanca Abella

La llave que hace efectivos los derechos de todas las personas es el acceso universal, de ahí que el sector de la discapacidad celebre cada norma que amplíe ese acceso hasta ahora tan limitado. Hoy se aplaude la reforma de la Ley General de Derechos de las Personas con Discapacidad y de su Inclusión Social, que establece y regula la accesibilidad cognitiva, que supone un evidente avance para muchas personas. Sin embargo, todavía quedan pendientes algunas demandas en cuestión de accesibilidad y desde algunos sectores se expresa, además de la alegría sincera por la reforma, un gran pesar por la oportunidad perdida.

Imagen del Congreso de los Diputados durante el pleno de hoy y en la votación de enmiendas del Senado a la Proposición de Ley de modificación de la Ley derechos de personas con discapacidadEl Pleno del Congreso de los Diputados ha dado luz verde este jueves a la aprobación definitiva de esta proposición de ley de modificación del Texto Refundido de la Ley General de Derechos de las Personas con Discapacidad y de su Inclusión Social, para regular y establecer la accesibilidad cognitiva y sus condiciones de exigencia y aplicación. Promovida por el CERMI, inició su tramitación hace casi dos años en el Senado, impulsada por Ciudadanos.
  
La reforma contempla “garantizar de forma efectiva la accesibilidad cognitiva de todas las personas con dificultades de comprensión y comunicación del entorno físico, el transporte, la información y la comunicación, incluidos los sistemas y las tecnologías de la información y las comunicaciones, y a otros servicios e instalaciones a disposición o de uso público, tanto en zonas urbanas como rurales”. 
 
En concreto, reconoce la accesibilidad cognitiva dentro del marco general de la accesibilidad universal; establece los pictogramas y la lectura fácil como apoyos complementarios; determina los ámbitos, condiciones y plazos en los que será exigible esta accesibilidad; prevé la creación del Centro de Referencia Estatal de Accesibilidad Cognitiva, y contempla un plazo de tres años para que el Gobierno apruebe el desarrollo reglamentario que garantice este derecho, tras la realización de los estudios pertinentes.
 
"Supone un logro histórico", aseguran en Plena Inclusión España. "Lamentamos que se hayan tardado tantos años en incorporar dos definiciones dentro de una ley, pero nos quedamos con la lectura positiva: la puerta abierta. Ahora tenemos mucho trabajo por delante, gracias a esa puerta, para desarrollar el detalle normativo, un reglamento, crear un centro estatal de accesibilidad cognitiva que nos ayude a profundizar", explican. 
 
La Confederación Autismo España define la reforma como “fundamental” y alude a la importancia del trabajo posterior a su aprobación, pues será cuando “se podrán aterrizar de forma tangible las demandas del sector y las concretas de cada colectivo”. Asegura que “estamos ante un primer paso fundamental para la puesta en marcha de abordajes que puedan suponer una mejora sustancial en la calidad de vida y participación en condiciones de igualdad de las personas con autismo, sin olvidar los beneficios para la sociedad en su conjunto”. 
 

Reforma incompleta

 
Sin embargo, la reforma no acaba de recoger las demandas de todas las organizaciones de la discapacidad, que lamentan la oportunidad perdida. Así, desde Salud Mental España reivindican “un concepto más amplio de accesibilidad” que reconozca “la entidad diferenciada de las necesidades de cada colectivo”, insistiendo en que “nuestra reivindicación en esta materia se resume en reclamar de los poderes públicos la regulación y promoción de la accesibilidad psicosocial, junto con la física, cognitiva y sensorial, adoptando medidas individuales y estructurales que eliminen las barreras que la dificultan o impidan, incluidas las actitudinales, administrativas y sistémicas o simbólicas que afectan de manera específica a las personas con discapacidad psicosocial”. 
 
Tampoco Down España muestra una gran satisfacción, pues entiende que “es un paso incompleto todavía, ya que la regulación se ha centrado más en destacar los apoyos necesarios a la accesibilidad cognitiva (pictogramas, Lectura Fácil, recursos aumentativos/alternativos…) y ha olvidado el principio general que fundamenta la accesibilidad cognitiva, que es su carácter de accesibilidad universal”.
 
La reforma de la Ley General de derechos de las personas con discapacidad y de su inclusión social, que regula por fin la accesibilidad cognitiva, recoge adecuadamente los ámbitos en los que las personas con Daño Cerebral tienen dificultades a consecuencia de la no accesibilidad cognitiva, sin embargo, desde Fedace echan en falta que en ese texto “se indique que supone un apoyo para las personas con Daño Cerebral al igual que consta expresamente el apoyo que supone para las personas con discapacidad intelectual o autismo”. Explican que no han participado en la redacción de esta modificación, en la que “ha sido omitido el colectivo de personas con Daño Cerebral pese a que la accesibilidad cognitiva sea crucial para nuestro colectivo”.
 
En opinión de Confederación Aspace también han quedado puntos sin concretar en esta reforma, como es “el reconocimiento de la Comunicación Aumentativa y Alternativa como herramienta de comunicación válida en cualquier entorno; incluyendo el sanitario y, de forma especial, el judicial. Para muchos hombres, mujeres, niños y niñas con parálisis cerebral estos sistemas son su principal o única herramienta de comunicación. Sin ellos no podrían vivir de forma autónoma ni participar en la sociedad”.  
 

Mucha tarea por delante

 
Maribel Cáceres, vicepresidenta de Plena inclusión España, en el Senado el día que se aprobó la reforma La importancia de esta reforma no se limita a la aprobación parlamentaria y su publicación en el BOE, queda por delante una tarea fundamental en la que se podrán mejorar algunos aspectos. En Plena Inclusión España se preparan para abordar ese trabajo técnico: “consensuar un desarrollo normativo, profundizar en estudios e investigaciones, avanzar en otras herramientas más allá de la lectura fácil -como los sistemas alternativos y aumentativos de comunicación-, poner en marcha estudios reglados especializados y asignaturas en otras carreras, crear un centro estatal que contribuya a aglutinar recursos o asegurar financiación para todo esto, entre otras”. 
 
Por su parte, Autismo España espera poder trabajar de forma estrecha con las administraciones competentes “para garantizar que esta reforma sea efectiva, tangible, y traslade estas mejoras desde el papel hasta la vida de las personas con TEA, que articulamos en torno a cuatro líneas estratégicas de actuación: Señalización en espacios públicos; Lectura fácil; Diseño para todos de las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación) y Promoción de recursos de apoyo a la comunicación (los Sistemas alternativos de comunicación sustituyen al lenguaje oral cuando éste no es comprensible o está ausente, mientras que los Sistemas aumentativos de comunicación intervienen sobre los canales auditivo y visual para recibir la información del entorno, comprenderla, organizarla y poder expresarla. Usan signos manuales, gráficos y el habla)”. 
 
“La regulación de este derecho constituye un paso más hacia esa aspiración de poner los derechos humanos en el centro de las normas y actuaciones”, afirman en Salud Mental España. Sin embargo, señalan que “nuestras expectativas con respecto a este reconocimiento es que suceda lo mismo con nuestras reivindicaciones en esta materia y se reconozca la entidad diferenciada de las necesidades de cada colectivo y llegue el día en que se incorpore la accesibilidad psicosocial en los términos que reiteradamente hemos venido demandando en nuestros informes anuales de derechos humanos y en todos los foros en los que hemos tenido la oportunidad de participar”. Se trata de una cuestión fundamental para este sector, entre otras cosas, porque contribuye a “combatir el estigma y los prejuicios que conducen a la discriminación, la violencia, el abuso, la exclusión social y la segregación”, los cuales constituyen obstáculos para el efectivo ejercicio de los derechos de las personas con discapacidad psicosocial.
 
“Llegan años de mucho trabajo y avance”, anuncian en Down España, e insisten en que “la base última de la Accesibilidad Cognitiva debe descansar en su Universalidad y en su defensa del Derecho de toda persona a entender la información”, de ahí que contemplen con esperanza el desarrollo reglamentario que puede solventar los errores de la reforma: “Toca ahora desarrollar las órdenes que regulen cómo hacer posible ese derecho a entender universal que abarque también a las personas con discapacidad, establecer normas y reglas de uso general, modificar y apoyar económicamente la transformación de todos nuestros recursos de comunicación (sobre todo de Comunicación Pública), mejorar y modificar las páginas Web de la Administracion y de todo tipo de Servicios Públicos para que sean entendibles y accesibles para todas las personas”. 
 
El objetivo de Fedace en esa futura tarea que todos asumen es “poder participar en los grupos de trabajo vinculados al Plan Nacional de Accesibilidad citado en la Ley, así como en el futuro Centro de Referencia Estatal de Accesibilidad Cognitiva a fin de proponer medidas concretas que ayuden a las personas con Daño Cerebral”.
 
Mientras, desde Aspace muestran gran interés en ese desarrollo normativo que posibilite y garantice el empleo cotidiano de la accesibilidad cognitiva y “ a fin de dotar de efectividad a la accesibilidad universal como derecho llave para el ejercicio del resto de derechos, seguiremos luchando para que esta ley se complemente con la incorporación de la Comunicación Aumentativa y Alternativa como un elemento más de la accesibilidad universal, en particular, como parte de la accesibilidad sensorial y de la comunicación”. Explican que “es importante reforzar esta ley, incorporando un apartado que haga alusión a la Comunicación Aumentativa y Alternativa (CAA) ya que la CAA no puede incluirse dentro de la accesibilidad cognitiva porque la mayoría de las personas con parálisis cerebral que utilizan este tipo de comunicación, tienen capacidad intelectual plena”. 
 
 
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